Una de las recetas más clásicas de la navidad son las galletas de jengibre. Son deliciosas y pueden ser decoradas con motivos navideños, ideal para los niños. Su origen se remonta a la reina Isabel I de Inglaterra, la cual le regalaba a la gente galletas de jengibre con forma de hombre, de allí que tengan esta clásica forma, aunque puedes hacerlas como quieras.
Ingredientes
Ø 260 gr de harina.
Ø 150 gr de mantequilla.
Ø 100 gr de azúcar morena.
Ø 5 gramos de bicarbonato.
Ø 1 cucharadita de canela en polvo.
Ø 1 cucharadita de jengibre en polvo.
Ø 1 huevo.
Ø Sal.
Para decorar (opcional):
Ø 1 clara de huevo.
Ø 100 gr azúcar glas.
Ø Zumo de medio limón.
Ø Chocolate de cobertura.
Ø Colorante alimentario.
Foto de http://www.1001consejos.com
Elaboración
Se toma un bol suficientemente grande y allí se va a tamizar la harina, luego se coloca la azúcar morena, el bicarbonato, la canela, el jengibre y una pizca de sal. Aparte se bate un huevo con bastante fuerza, y luego se añade a la mezcla de los secos. La mantequilla se debe batir hasta que esté suave y cremosa, luego se agrega a los demás ingredientes hasta que se incorporen y se forme una masa homogénea.
En una superficie lisa se espolvorea harina y se coloca la masa para estirarla con el rodillo varias veces hasta que esté bien suave, luego se estira masa que tenga aproximadamente medio centímetro de grosor.
Con los moldes navideños irás cortando poco a poco la masa y colócalas en bandejas que estén enmatequilladas y enharinadas, o si prefieres puedes usar papel encerado para el horno. Si no tienes cortador de galletas, puedes hacerlo con un vaso o recipiente que tenga el tamaño que desees.
Se colocan en el horno a 180ºC durante unos 15 o 20 minutos, todo depende de la potencia, la mejor manera de saber si están listas es cuando estén doradas. Se retiran del horno y se dejan enfriar para poder decorarlas. No te preocupes si al sacarlas te parecen blandas, luego que se enfrían se ponen crujientes.
Si quieres decorar puedes derretir el chocolate a baño de maría o en el microondas. Y para hacer glaseado blanco se bate la clara a punto de nieve, se añade un poco de azúcar con una gotas de zumo de limón, y si deseas agregar colorante.